MI PRIMER VIAJE A JAPÓN, CIFRAS Y DATOS PRÁCTICOS
Nelo | January 17, 2016Hace poco regresé de mi primer viaje a Japón, cumplí 45 años el mes pasado, lo digo para que se me entienda: tengo prisa, ya no puedo perder el tiempo, debo espabilar, los telediarios pasan cada vez más rápido, todo se acelera; así que ya era hora, me tocaba.
-Pero cariño, estas navidades vienen todos los niños a casa.
-Por eso, precisamente por eso…
Fui solo pues, estuve 12 días, del 1 al 13 de Enero de 2016 -Actualización volví en 2017 y los precios se mantienen- Nunca he sido muy de números, me marean, pero esta vez va a ser diferente. Estas son las cifras del viaje:
GASTOS TOTAL VIAJE: 1102´9 € EN 12 DÍAS.
No está mal teniendo en cuenta que la mitad se va en el avión. Este es el desglose:
-521,75 € billete Avión Valencia-París-Tokio i/v. Air France. Se puede encontrar más barato si uno no decide irse de viaje una semana antes de realizarlo, como fue mi caso.
-505 € de gastos en 12 días.
-76,15 € Japan Bus Pass de 3 días.
Si sigues leyendo el artículo hasta el final está todo detallado. Los precios que doy en yenes sólo tienes que pinchar encima de ellos para saber su cambio en euros.
-1636 fotos (incluidas las que repites varias veces para que salga una buena) de ellas 15 vídeos, que da un escalofriante promedio para alguien que no le gusta hacer fotos de 5`6 fotos por hora, lo que dice mucho a favor de Japón. O una cada 10 minutos.
El resultado de muchas no puede calificarse como óptimo, aunque siempre muestran bien como es Japón.
-23.630 Kilómetros en total, 21.599 kms. en avión. 1.642 kms. en autobús. 225 en tren. 160 en bicicleta. 30 kms. en metro. 20 kms. andando. 3 kms. en tranvía 500 m. en ferry. No me subí a ningún taxi.
De todos los kilómetros que hice, me quedo sin duda con los de la bici. Descubrir un país sobre dos ruedas no tiene comparación. Simplemente fantástico.
Si quieres leer el artículo sobre dónde alquilar bicicletas en Tokio puedes pinchar aquí.
Si quieres leer el artículo de la ruta ciclista Shimanami Kaido puedes pinchar aquí.
En tan poco tiempo de viaje me dediqué a dos cosas, una fue Tokio y la otra hacer una de las rutas cortas de bicicleta más espectaculares del mundo, la Setouchi Shimanami Kaido. Tenía más ideas pensadas por si me daba más tiempo pero no fue así.
Recorrer pedaleando la Cycling Road Shimanami Kaido ha sido lo más de este viaje, y me asoma, a la posibilidad de que yo también soy capaz de viajar en bicicleta…
Voy a situarme como viajero y diré en que nivel estoy para así dar una idea más exacta de lo que se puede esperar en un viaje a Japón hablando de dinero.
Esta vez no usé couchsurfing, ni camping, ni habitación compartida. Dormí en habitación individual cada noche. No hice autostop, ni me cociné.
“”Actualización 2017. Si sois una pareja la manera más barata de encontrar alojamiento en Japón es alquilar un apartamento en bnb air. Después de buscar y buscar así lo hicimos nosotros durante una semana en Osaka, una buena base para también visitar ciudades vecinas como Kioto, Kobe o Nara””
Si quieres saber más sobre nuestro viaje a Osaka puedes pinchar aquí.
Aunque si quiero soy bastante asceta -“agarrado” diría alguna ex-, esta vez no me privé de nada, tiré de bares y restaurantes, fui donde quise, alquilé bicis, tomé los medios de transporte que me dio la gana, y los tentempiés que quise.
No miré, hasta hoy, el gasto de dinero, aunque sí que fui cuidadoso, si el tren bala valía 100 y el regional 25, tomaba el regional, de un menú miraba siempre los platos más económicos y nunca me senté en ningún sitio sin saber lo que me iba a costar, miraba ese tipo de cosas, eso sí.
Siempre busqué hoteles y hostales limpios y baratos, no fallé en ninguno. Excepto las 2 primeras noches de Tokio no llevaba nada reservado y fui sobre la marcha.
Los 505 € de gastos de viaje incluyen todo lo que me gasté allí excepto el billete de avión, y el Japan Bus Pass, esto es hoteles y hostales, sin compartir habitación. Comidas, cenas, desayunos, teniendo en cuenta que jamás me cociné, aunque use el microondas de los hoteles en 3 ocasiones y el de las convenience-stores en otras ocasiones. Comiendo en la calle, bares, restaurantes y convenience store.
Los convenience store, son como minimarkets, donde a última hora de la tarde bajan los precios de los platos hechos. hay comida caliente, y en algunos de ellos, sillas y mesas para sentarse.
Nunca gasté más de 5 € por comida, excepto una noche que me gasté 18 € en una cena porque así lo quise, me tiré al rollo porque había hecho 100 kms. en bici y me lo había ganado.
Transportes incluye todos los que utilicé desde que puse el pie en tierra en Japón excepto el Japan Bus Pass de 3 días (pasé 2 noches en un autobús), esto es transporte metropolitano de Tokio, JR y Metro incluidos traslados a Aeropuertos –Llegué por el de Haneda y me fui por el de Narita.
Alquiler de bicis, 2 días en Tokio y 2 días para hacer la ruta ciclista Shimanami Kaido completa atravesando 6 islas.
Trenes interurbanos Hiroshima-Onomichi, e Imabari-Matsuyama. 1 ferry en Onomichi.
2 Onsen. Uno en Imabari con Spa –450 yenes– y el otro el Dogo Onsen –400 yenes– más antiguo de Japón el Dogo Onsen en Matsuyama . Tranvías de Matsuyama.
Si quieres leer sobre mi primera vez en un onsen japonés puedes pinchar aquí.
Compras varias, para el viaje mismo, cortauñas, adaptador y cosas por el estilo. Y para casa, algunos souvenirs algo retorcidos, que en Japón los hay muy diversos, y bien de precio.
Si quieres leer sobre mi visita a un sex-shop en Japón puedes pinchar aquí.
JAPÓN, SI UNO LO DESEA, ES MÁS BARATO QUE ESPAÑA, O CUALQUIER PAÍS DE LA EUROPA OCCIDENTAL.
CON DETALLE:
TOKIO
Al llegar al Aeropuerto de Haneda, en Tokio, compré una tarjeta Saica, que no es sino un monedero electrónico válido para todo el transporte de la zona de Tokio y también para todas las máquinas expendedoras. La cargas con el dinero que desees y no te tienes que preocupar de ir sacando billetes en cada estación de metro, autobús, o tren de cercanías (JR). Pasas la tarjeta por los lectores y adelante. Simple y práctica. Y gratuita, ya que cuando la devuelves te dan los 500 yenes de fianza. También conseguí un plano de la ciudad y una guía en español, que se entregan gratis en la Tourist Information del aeropuerto.
De Haneda a cualquier punto de Tokio, con Monorail, tren y metro, no debe de costar más de 6 a 9 €. De Tokio al aeropuerto de Narita 1030 yenes en el JR local train o 1000 yenes en autobús.
El mejor cambio de dinero lo encontré en Akihabara, pero no en cualquier tienda, aún así no preocuparos del cambio, no hay grandes diferencias. por 1 euro en el aeropuerto daban 123 yenes, en Shinjuku 126, y en Akihabara 127 yenes, y eso no en todas las casas de cambio de la zona, hay que buscar bien.
Dormí en Tokio en el Hotel Juyoh. 24 € la individual a través de booking y un poco más barata en su página web. Hotel rollo hostel pero de varios pisos, sencillo, limpio, agradable, simpático, te dan hasta un kimono para estar allí cómodo y resuelven todas tus dudas con una sonrisa. Habitación con litera, frigo, y aire acondicionado. Con cocina comunitaria, ambiente variado, mochileros, viajeros, japoneses.
Minamii Senju es barrio tranquilo al norte de Asakusa y al este de Ueno, un barrio de trabajadores humilde, una especie de gueto, un Japón no edulcorado, desde el que puedes llegar andando hasta Asakusa o Ginza.
Perfecto, para mí claro, que luego va otro y qué sé yo, no le gusta. El barrio que se extiende en torno a la estación de Minami Senju, es tranquilo de noche y fines de semana, sin acabar de despertar del todo por el día. Algo canalla y medianamente ebrio, muestra también el Japón de la supervivencia.
Alquiler de bici en Tokio. 300 yenes/día, 500 yenes/3 días, dudo que encontréis una opción mejor y más barata. En Asakusa en el hotel Sunroute. Pedalear por Tokio es una experiencia única, vibrante y maravillosa. Puedes pasar entusiasmado 12 horas pedaleando por la megaurbe, esa noche ni jet lag ni nada, dormirás bien. Tokio es una ciudad acostumbrada a las bicicletas, no recibirás ni un solo bocinazo, podrás aparcarla hasta donde está prohibido, lo más que te pondrán es una advertencia.
En todo mi viaje a Japón no gasté nunca más de 5 € para comer, cenar o desayunar, excepto una noche que quise tirarme al rollo y me gasté 18 €. Estos precios los tuve comiendo de caliente y fuera de casa, en bares o restaurantes.
Muy pocas veces compré comida hecha en los convenience store y la calenté en el micro del hostel. Utilicé, sobre todo en Tokio, una cadena de comida japonesa, muy buena y barata cuyo precio ronda los 4 € que podréis reconocer por el tipo de comida en las fotografías de la entrada y por sus precios.
Siempre me gusta ver panorámicas de las ciudades que recorro. En Tokio encontré dos espectaculares y gratis.
Una es la muy conocida vista desde el ayuntamiento de Shinjuku.
La otra la encontré en el Tokyo International Forum de al lado de la JR. Tokyo Station. Impresionante edificio de cristal situado detrás de la estación.
JAPAN BUS PASS
El Japan Bus Pass que compré es un bono para viajar durante tres días en los autobuses de la compañía WILLER EXPRESS. Cuesta 10.000 yenes.
Las grandes ventajas sobre el Japan Rail Pass (para trenes) son su precio, es mucho más barato, y el poder usar tus días alternativamente, cuando a uno le viene en gana por un periodo de dos meses. También la posibilidad de pasar la noche en buses nocturnos, ahorrando en noches de hotel. Son autobuses cómodos con una especie de capucha individual, para dormir mejor.
Las desventajas son que hay muchas menos rutas para elegir, y las paradas de Willer en ocasiones son difíciles de encontrar.
Rutas Willer Express en Japón
RUTA CICLISTA SHIMANAMI KAIDO
Impresionantes 80 kms de carril bici entre Onomichi y Ibamari, atravesando seis islas con sus 6 majestuosos puentes monumentales.
Desde Tokio usé el Japan Bus Pass para ir de noche hasta Hiroshima, desde allí el tren regional de la línea Sanyo –1490 yenes– para llegar a Onomichi, donde alquilé una bici –2000 yenes, 2 días-, que devolví en la ciudad donde finaliza la ruta, en Imabari –1000 yenes devolverla en otro punto de donde se alquiló-, después otra vez tren regional –800 yenes- a Matsuyama -, desde donde volví a Tokio ya usando de nuevo el Japan Bus Pass.
Hoy en día lo hubiera hecho al revés, ya que los vientos predominantes de la zona indican que es mucho mejor y menos cansado hacer Imabari-Onomichi, que en sentido inverso, como yo hice.
Si quieres saber más sobre Onomichi, uno de los extremos de la ruta Shimanami Kaido puedes leer este otro artículo pinchando aquí.
Los hostales que utilicé para hacer esta ruta fueron tres.
En Onomichi: HTS GUESTHOUSE 2800 Yenes, Ideal, Antigua casa de madera, preciosa, equipada, limpia, acogedora. Futón sobre tatami, estaba solo.
En Imabari CYCLO NO IE. 2700 Yenes. Primera noche individual a precio de litera, segunda noche, litera cápsula. El paraíso de los ciclistas, un hostal fantástico en todos los sentidos.
Dónde dormir en la ruta ciclista Shimanami Kaido.
La ruta está salpicada por estaciones muy equipadas de ayuda al ciclista, poco antes de que anochezca para en una y pregunta las posibilidades de alojamiento, te lo dirán detalladamente y llamarán por teléfono por ti si es necesario. Así fue como encontré en la isla de Ikuchi Ima, antes de llegar a Setoda Sunset Beach, una pensión para trabajadores, fue toda una experiencia alojarse allí. 3800 Yenes, cena, alojamiento y desayuno. Para mucha más información sobre esta ruta ciclista no dejes de pinchar en este otro post.
TÓPICOS ROTOS SOBRE JAPÓN O NO.
En Japón todo es extremadamente fácil y parece que te están esperando para resolver tus dudas, todo encaja y todo funciona, los carteles sí que están en inglés, y si acaso alguno no lo está, tendrá cerca otro que sí. La gente sabe inglés, y el que no, se dejará la piel para que tú lo entiendas o buscará el modo. No salen huyendo, a mí no me pasó jamás, alguno se dio un pequeño susto pero nada más, Son muy amables y extremadamente educados, ni una sola mala cara en 12 días.
El alojamiento es más barato que en mi ciudad, Valencia, donde es imposible encontrar una habitación individual por menos de 30 €, en Japón nunca superé esa cifra y siempre dormí solo.
Se come caliente por bastante menos de 5 €, hay miles de cosas aparte del shusi, está todo buenísimo, incluso la comida que parece que haya cagado mi perro dentro.
Aprendí, antes de salir, 10 palabras en japonés, para aproximarme a ellos, esto es muy conveniente y me vino muy bien, durante el resto del viaje no dejé de aprender otras palabras.
En todo Japón, no hay engaños, no hay propinas, no hay timos.
Si algo te parece caro siempre habrá una alternativa más barata.
Tres cosas nunca te van a faltar vayas donde vayas, éstas son: una máquina expendedora de bebidas, una de cigarrillos y un baño limpio. Cada vez que tengas alguna necesidad vas a encontrar un baño público en el que se pueden comer sopas de limpio que está, aunque sea en medio de las montañas.
La amabilidad de los japoneses roza la exageración, muchas veces si me veían haciéndome un selfie, se ofrecían para hacerme una foto, si me veían perdido con un mapa entre las manos paraban a preguntar si necesitaba ayuda, en una ocasión una chica se enteró que iba sin guantes en la bici y quería regalarme los suyos.
He usado internet en teléfonos móviles de desconocidas para consultar cualquier cosa, si alguien ve que no entiendes se ofrece a hacerte de traductor, nadie se niega o pone mala cara porque les hagas unas fotos, excepto en los lugares que pone expresamente “fotos no”.
La gente en los pueblos pequeños te saluda por la calle, intentan hablar contigo, saber cosas de ti, pero muy sutilmente, sin querer molestar, sin desear perturbar incluso.
Una vez iba sin afeitar, el careto de no dormir la noche anterior, comía mirando al mar, en una ciudad nada turística, llevaba un gorro, mi aspecto era el de un vagabundo porque no es lo mismo estar sin afeitar a los 20 -quedas “mono”-, que a los 45 -que pareces un desgraciado-, una señora paseaba su perro, hablamos un rato, tranquilamente, no tuvo miedo, inició y mantuvo ella el peso de la conversación.
Cada vez que entras y sales de un comercio se oye un concierto de frases, protocolo de saludos y alabanzas, imagino. Todo sale y llega a su hora. Es el país de lo sutil, del detalle, se busca la perfección y el buen gusto. Se piensa en los demás, en el otro, en, al menos, no fastidiarlo.
Es un país lleno de sorpresas y de matices. Existen conceptos nuevos para los occidentales, milenarios allí:
Si quieres sorprenderte puedes leer este otro artículo sobre el wabi sabi pinchando aquí.
Si nunca estuviste, olvida todo lo que imaginas sobre Japón y sumérgete en él.
Japón será como un relajante y vaporoso baño en agua caliente después de una dura jornada de viento, frío y nieve. La misma agradable sensación.
Después de Japón es fácil pensar que uno ya puede morirse, porque ya vio todo lo que tenía que ver.
Pero tranquila nena, antes de que me visite la pálida dama volveremos juntos hasta aquí. Esos ojos marrones tienen que ver todo esto.